¿Con qué ventajas cuentas las pymes con respecto a las grandes superficies?

Descubre las oportunidades que tienen las pequeñas empresas en la nueva normalidad.
El pequeño comercio está de vuelta. Un regreso en el que, como ya ocurría antes de la pandemia, seguirá encontrando en las grandes superficies un competidor, en ocasiones, inabordable. ¿O si existen ventajas de las pymes con respecto a ellas? Desde Compartiendo conocimiento queremos mostraros una serie de herramientas con las que poder romper ese mito de que ‘el pez grande siempre se come al chico’. 

Estas soluciones que nos ayudarán en el proceso de esta vuelta al mercado son:

  • Personalizar al máximo tu negocio, poniéndolo al servicio de nuestro cliente. Tener un trato cercano y profesional será lo que marque la diferencia con las grandes superficies. 
  • Tener una oferta especializada, algo que conseguiremos estudiando el nicho de mercado al que nos dirigimos, de cara a ofrecerles el producto o servicio que más puede convenirles, en base a sus necesidades.
  • Ser flexibles, algo que los pequeños comercios tienen más a su alcance. Nos permitirá acceder a muchos de los productos con antelación (con respecto a las grandes superficies).

Atentos a las oportunidades

Pasada ya la pandemia del COVID-19, la nueva etapa que se abre ante nosotros nos acerca nuevas oportunidades, que resumimos en 6 puntos:

  • ¿Qué vamos a hacer en esta nueva normalidad? Es necesario que aprovechemos las herramientas previamente presentadas. Hemos de hablar más con nuestros clientes, adecuarles la oferta, etc. Expliquémosles claramente la forma en la que vamos a hacer las cosas en esta nueva normalidad y, ante todo, trabajemos la oferta de compra.
  • ¿Cuál será nuestra oferta de valor? Debemos explicársela bien, además de adaptarla a la nueva normalidad en la que nos encontramos. También hemos de hacer que los clientes nos conozcan y nos sigan. Lo conseguiremos siendo coherentes con lo que ofrecemos y siendo honestos y profesionales. Por último, es bueno que tratemos de abrir algún servicio o producto nuevo. 
  • ¿Responderemos con rapidez? Las grandes superficies son bastante más rígidas que los pequeños comercios. Por ello, utilizaremos esa flexibilidad y esa capacidad de decisión rápida para ajustar nuestros productos y nuestra oferta al cliente, y ofrecérsela primero. Podemos utilizar la venta a distancia para potenciar este proceso, algo que la gran superficie no puede hacer.
  • ¿Cómo vamos a mantenernos informados y actualizados? Usaremos las redes sociales, tanto para contactar con nuestros clientes como para estar al día. También contaremos con las plataformas online y de venta a distancia, que junto con la logística de proximidad, nos permitirán llegar más fácilmente a los clientes, lo mismo que las plataformas de geolocalización gratuitas.
  • ¿Haremos nuestro negocio accesible? Tenemos que atender a las personas mayores, darles prioridad. Hemos de ser capaces de ofrecerles los productos que necesiten, poniéndolos a su disposición de la forma más sencilla posible. Nos ayudaremos de los pedidos telefónicos e intentaremos que ellos elijan la forma de pago, lo que les hará el proceso de compra mucho más sencillo.
  • ¿Aprovechar las últimas tendencias de consumo de los jóvenes? Fomentaremos el comercio de proximidad, de Km.0, de productos BIO, de productos reciclables y sostenibles, etc.  También hemos de pensar en que las familias han cambiado. Muchas de ellas, por ejemplo, se componen de una sola persona, los singles, los cuales tienen unas necesidades de compra totalmente diferentes. También puedes ofrecer productos ‘gourmet’, especializados y que te pueden diferenciar de la competencia y de las grandes superficies.

Adicionalmente, es recomendable que mantengamos una tesorería que nos permita disponer de un colchón de seguridad con el que poder aprovechar oportunidades de mercado.

¿Cómo pueden las pymes llevar a cabo alianzas, o iniciativas, más innovadoras para salir de la crisis?

Nos encontramos ante una situación inédita. Por lo tanto, no disponemos de un manual de instrucciones con recetas para salir de ella. Lo que sí conservan los pequeños negocios es esa cercanía con sus clientes, que las grandes empresas querrían utilizar y les es complicado. Una cercanía que les da un profundo conocimiento de sus clientes el cual, bien gestionado, trasciende la mera relación comercial. 

Un ejemplo de esta ‘humanización’ que tanto buscan las grandes compañías, y en la que invierten muchos recursos, la muestran las asociaciones de comerciantes de barrio que venden a sus vecinos. Eso significa que el comprador no adquiere el producto o servicio en una tienda sino de las manos de su vecino, que le llama por su nombre, le pregunta por su familia,...  Son las mismas que, en ciertos casos, se lanzan a la venta a distancia. Simplemente necesitan una red de contactos, la cual obtienen de los datos que les facilitan sus clientes, y solo requieren de la capacidad de poder distribuir y cobrar los envíos.

Otro ejemplo, válido para muchos negocios, son los bonos de venta anticipada. El cliente recibe una invitación, convirtiéndose en cliente VIP, que le da acceso por adelantado a un producto o servicio. Esto ayuda al proveedor a optimizar sus recursos, sobre todo si es un negocio con espacio y recursos reducidos.También optimiza su tesorería.

Necesitamos que nuestras pymes y pequeños negocios estén de vuelta lo antes posible y a pleno rendimiento, ya que son parte crítica de nuestro entramado económico. Y los que mejor lo harán serán aquellos que vean una oportunidad donde los demás ven una amenaza.