Valentín Fuster

Cardiólogo y director del CNIC

"El corazón sirve para dar cantidad de vida; El cerebro calidad de vida"

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La educación quiere decir que sabe más y más. Tiene muchas más variables para moverse en la vida. Y cuanto más educado está, más es capaz de dominar al mundo alrededor. Cuanto menos educado está, el mundo te está dominando a ti. La educación es muy importante para la autoestima. Cuanta más educación hay, más entra el razonamiento apropiado para hacer o simplemente, escoger lo que es adecuado. Cuanto más sabemos, más estamos en control de nosotros y más podemos escoger qué es lo adecuado para nosotros.

No hay cosa peor que el intentar cambiar la vida de una persona. Todos nacemos con talentos y con objetivos, con cosas que nos atraen. Una de las cosas más importante en la vida de todos es detectar cuál es nuestro talento. Y alguien te lo ha de decir. Por eso te hablo de los mentores y tutores. Porque si en la vida, uno quiere seguir simplemente con una conducta que no sea neurótica, no hay nada más importante que hacer algo relacionado con el talento que uno tiene. Yo tengo la gran suerte de que puedo utilizar mi talento a un nivel que me ha dado la sociedad y por esto soy una persona con mucha suerte. Si hay posibilidades de que uno se conozca bien y pueda seguir la línea de lo que uno tiene, de este talento, es fundamental invertir en él.

Lo que sabemos del corazón es que está aquí y late. Pero, la verdad es que sabemos muy poco. Por ejemplo, el corazón late sesenta, setenta, ochenta veces por minuto, con cuatro válvulas que se abren y se cierran, con la sangre que entra y sale. Y, en cambio, fíjese usted, no pasa nada durante… ¿Sabe cuántas veces late en la vida de un individuo? Millones de veces. En cambio, un avión, cada cuatro días lo tienen que mandar al garaje para mirarle qué es lo que está equivocado, etc. ¿Cómo es que el corazón, que mecánicamente es tan complejo, no necesita de reparación? Somos nosotros, que lo estropeamos. Es decir, que cuando usted me pregunta: «¿Qué sabemos y qué no sabemos?» Sabemos muchas cosas del corazón, pero la base de cómo el corazón es intacto, con tantos años de latir y con tanta complejidad… Esto, para mí, yo no le puedo dar la respuesta. He hablado con muchos físicos, y no tienen ni idea. Lo que nos lleva al tema fundamental, que también me gusta decir… Y es que el creer que científicamente ya lo sabemos todo… Yo le diré que el que le diga a usted esto es un ignorante. En realidad, sabemos muy poco. Incluso de mi propia especialidad. Ustedes dirán: «Bueno, yo a este tipo no lo voy a ver si tengo un problema de corazón». Bueno, no. Me puede venir a ver porque conozco bien la enfermedad y cómo tratarla. Pero estudiar realmente cómo funciona el corazón y todas las bases biológicas y esto, yo le aseguro que es muy complicado, muy difícil.

"La educación es un arma muy importante para la autoestima. Cuanto más sabemos, más podemos escoger lo que es adecuado para nosotros"

El tema de la salud no puede ser un tema individual de una propia persona: «Yo me voy a cuidar». Necesitas un ambiente, necesitas lo que digamos un catalizador, sobre todo de grupo, incluso en los niños.

Hay cuatro tes que son de cómo uno madura personalmente, y hay cuatro as de cómo uno transmite, de cómo es en el mundo que vive. Y las cuatro tes, la primera te es tiempo para reflexionar. Es decir, cada uno de nosotros, al menos yo, quince minutos al día pienso en lo que es prioritario y en lo que no. El segundo es cuál es tu talento. Y esto es fundamental, como ya he dicho. Saber cuál es tu talento y aplicarlo. El tercero es transmitir positividad. Y, el cuatro, ya lo he dicho, es tutoría. Luego hay cuatro as que es cómo uno se presenta en el mundo. Cómo uno intenta ayudar al mundo de alrededor, el sentirse útil. Esto es absolutamente crítico para la autoestima. La primera es tener una actitud positiva. El segundo es aceptar quién eres. El tercero es la autenticidad, la autenticidad quiere decir que eres el mismo por la mañana, por la tarde y por la noche. No eres una persona cambiante depende de con quién hablas. Y el último y más importante es el altruismo. Es decir que, en la vida, yo me he dado cuenta de la gente más feliz son las que dan. No los que reciben. Son fórmulas que ayudan sobre todo cuando meditas y estás quince minutos pensando, sabes muy bien cómo estás funcionando y tienes una metodología. El problema de la sociedad actual es que puedes perder la metodología muy fácilmente a menos que tengas este método de ser persistente y ser tú quién eres y dominar tú lo que está alrededor tuyo.

La felicidad es un término difícil de definir. Pero sí que puedo decir la estabilidad de la persona que te da esta sensación de autodominio, de autoestima, de que yo soy y soy quien soy y hago lo que tengo que hacer. Y aquí hay tres aspectos distintos. La felicidad se con quince puntos. Cinco puntos quiere decir, cuando yo me levanto por la mañana y tengo el día por delante, , estoy estimulado, me gusta lo que va a pasar hoy, voy al trabajo, o voy a lo que sea, estás estimulado. El número dos es la inestabilidad emocional, es decir, hay gente que un día está de una manera emocional y otro día está de otra. Y el tercero es: «¿Tiene tu vida un objetivo final?» Un objetivo que te mueve. Este es muy importante. Entonces, cuando hablamos de felicidad, yo hablaría de estabilidad, de autodominio, de autorrealización, de autoestima, esto es lo que estoy hablando. Pues estos son, básicamente, los tres estadios que se están siguiendo, y hay una puntuación. Y esto lo estamos haciendo ya en algunos de los proyectos que estamos empezando ahora. Es decir, que esta es la manera en la que se mide. Básicamente, estos tres aspectos son importantes. Lo demás es más cosmético.

Biografía

Valentín Fuster es Director del Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares (CNIC) en España y director del Instituto Cardiovascular del hospital Mount Sinai de Nueva York. Ganó el Premio Príncipe de Asturias de Investigación gracias a sus investigaciones acerca del origen del infarto de miocardio. Es autor y coautor de títulos como La ciencia de la salud, Corazón y mente, Monstruos supersanos o La cocina de la salud. Reconocido internacionalmente, incluso es asesor científico del programa infantil Barrio Sésamo.