¿Qué debo saber antes de comprar una casa?

En relación a la vivienda

• Valorar si es el momento de comprar: ¿mejor ahora o más adelante? Una pregunta que todo el mundo se hace y para la que se debe analizar, en primer lugar, el mercado inmobiliario. Tras ello, y en segundo lugar, debe revisarse el estado de la economía familiar, para saber si se goza de la estabilidad financiera necesaria para hacer frente al pago de las cuotas de la hipoteca.
• Tener claro el tipo de casa que se quiere: otro de los aspectos que se deben saber antes de comprar una casa, una vez se tiene claro que económicamente es viable, es elegir entre sus distintos tipos. Actualmente se disponen de viviendas de obra nueva (sin construir o en construcción), de segunda mano o por cooperativa. Cada una de ellas tiene sus ‘pros’ y sus ‘contras’, además de corresponderle unos gastos diferentes (por ejemplo, en las ‘nuevas’ se abona un IVA que no se paga en las de ‘segunda mano’, en las que se liquida el ITP).
• Conocer el precio del inmueble: si ya se sabe el tipo de vivienda que se quiere, el siguiente paso es ver lo que cuesta (puedes calcularlo, desde BBVA, gracias a BBVA Valora). El valor de un inmueble puede variar en función, por ejemplo, de su ubicación (el precio de una casa en Madrid no es el mismo que el de un piso en un municipio más pequeño, situado en las afueras) o del entorno en el que se encuentre (con un mayor o un menor número de servicios disponibles). ¿Qué recomiendan los expertos? Estudiar bien lo que va a costar (incluidos los gastos) y comparar entre las opciones que ofrece el mercado inmobiliario, antes de elegir la casa en la que se vivirán los próximos años. 

Si se tiene claro todo lo anterior, y antes de iniciar el proceso de compra de una casa, también se ha de comprobar:

• Quién es el titular de la vivienda (y si coincide con la persona que la vende), para lo que se debe solicitar una nota simple al Registro de la Propiedad, la cual, además, incluye otra información que también es importante: si la vivienda está ‘libre de cargas’ o no.
• Qué materiales se han utilizado para su construcción, información que se puede encontrar en la memoria de calidades del inmueble.
• Cuál es su eficiencia energética, que queda justificada con el certificado de eficiencia energética.

En relación a la hipoteca

• El tipo de hipoteca a solicitar: el coste de una vivienda es elevado y pocos son los que pueden pagarlo ‘al contado’. Lo habitual es pedir una hipoteca, siendo importante saber que esta puede ser fija o variable, y que no solo se paga el dinero que se ha prestado, también los intereses y las comisiones (que dependen de la modalidad elegida).
• La cantidad a pedir al banco: lo habitual, aunque siempre hay excepciones, es que la entidad bancaria financie, como máximo, el 80% del precio de compraventa del inmueble. Esto hace que se deba tener ahorrado, como mínimo, el 20% restante, que se abonará al promotor (o vendedor, si se trata de una vivienda de segunda mano) en concepto de ‘entrada’.
• Los gastos adicionales a abonar: el primero, como hemos avanzado en el punto anterior, es la ‘entrada’ (un 20%, habitualmente, del precio final de la casa). A este se unen, a lo largo del proceso de compraventa, los gastos de notaría, registro o tasación del inmueble, entre otros.

De igual modo, no hay que olvidarse de comprobar otros factores como, por ejemplo, la evolución del euribor (que afecta a las hipotecas de tipo variable) o la inflación (y la inflación subyacente).

En relación a los gastos “futuros” de la vivienda

Existen una serie de gastos que, aunque se vayan a pagar tras la compra de la vivienda, deben tenerse en cuenta antes de adquirirla:

• Suministros: saber lo que se ha venido pagando en concepto de luz, agua y gas, hasta la fecha, permitirá que el comprador se haga una idea de lo que abonará por ellos.
• IBI: el Impuesto sobre Bienes e Inmuebles es otro de los gastos que se deben tener en cuenta, antes de comprar la vivienda, ya que se paga cada año y es ineludible. Su coste depende del valor catastral de la vivienda (al que se aplican una serie de coeficientes y reducciones).
• Comunidad: si la vivienda forma parte de un bloque de pisos, o de una urbanización, otra de las cosas que hay que saber antes de comprarla es lo que se paga de cuota de comunidad (al mes), para lo que hay que hablar con el presidente.
• Seguro de hogar: todas las viviendas, habitualmente, cuentan con este tipo de seguro.

Y si la casa es de segunda mano, también se debe revisar el estado de los elementos básicos, como la caldera, la fontanería, la electricidad o, también, los electrodomésticos (lavadora, lavaplatos, etc.).