Tipos de depósitos bancarios, ¿cuáles se pueden contratar?

Estas son las distintas modalidades de depósitos bancarios que hay.
A la hora de elegir un depósito, con el que “sacar” un mayor rendimiento a los ahorros, son varias las modalidades a contratar, las cuales vamos a explicarte, al detalle, en este artículo. ¡Sigue leyendo!
NIVEL DE RIESGO
1/6

Este número es indicativo del riesgo del producto, siendo 1/6 indicativo de menor riesgo y 6/6 de mayor riesgo.

BBVA está adherido al Fondo de Garantía de Depósitos de Entidades de Crédito de España. La cantidad máxima garantizada es de 100.000 € por la totalidad de depósitos constituidos en BBVA por persona.

El reembolso, rescate o la devolución anticipada de una parte o de todo el principal invertido están sujetos a comisiones o penalizaciones.

¡Descubre los Depósitos de BBVA!

Encuentra el que mejor se adapta a ti y rentabiliza tus ahorros de forma estable y segura.

¿Qué tipos de depósitos bancarios existen?

Como hemos avanzado, son varios los tipos de depósitos bancarios que se pueden “adquirir”.

El primero de estos “tipos de depósitos” es el depósito a la vista. Se trata de una “mezcla” entre un depósito bancario, en sí, y una cuenta corriente. Su funcionamiento es sencillo: se ingresa una cantidad de dinero que, pasado un tiempo, genera unos intereses. Se caracteriza, principalmente, por su flexibilidad, dado que, a diferencia de otros tipos de depósitos, va a permitir la retirada del dinero, de forma parcial o total, cuando se quiera (sin esperas y sin penalización).

El segundo tipo de depósito bancario es el depósito a plazos. En este caso, y a diferencia del depósito a la vista, el dinero que se invierte se mantiene en él, por un tiempo determinado, sin posibilidad de retirarse. Pasado este período, establecido en el contrato, se devuelve la cantidad y los intereses (fijados, también, en el contrato) a su titular. Es posible, aunque solo en algunos casos, que se permita su cancelación anticipada, la cual, habitualmente, conlleva el pago de una penalización.

tipos de depositos bancarios

El tercer tipo de depósito es el depósito estructurado. Se recomienda a aquellos perfiles de inversor más agresivos, es decir, los que dan preferencia a lo que se “quiere obtener” sobre el “peligro que se asume para conseguirlo”. Suelen vincularse, habitualmente, a activos de una rentabilidad variable (y no asegurada) que dependen de la evolución de uno o varios índices bursátiles o, también, de la cotización de un grupo de acciones u otro activo subyacente. Al igual que los depósitos a plazos, hay opción de cancelarlos, previo pago de una comisión.

¿Qué otros tipos de depósitos bancarios hay? 

Si bien los tipos de depósitos que se han comentado en el apartado anterior son los más comunes, existen otras modalidades que explicamos a continuación:

  • Depósitos bancarios en especie (o regalo): son los que, en lugar de ofrecer una remuneración económica, se la otorgan al titular del depósito en forma de regalo (cuyo valor será equivalente a los “intereses” que se hayan generado).
  • Depósitos a interés variable: en este tipo de depósito bancario, el titular, y contratante del mismo, desconoce el “beneficio económico” que va a obtener de él, el cual se relaciona, directamente, con el índice que se tome como referencia (normalmente, el euríbor). De hecho, hay casos en los que no se obtiene ninguna rentabilidad.

BBVA y los tipos de depósitos bancarios

Si estás interesado en contratar un depósito bancario, en BBVA te ofrecemos una amplia gama, adaptada a tus necesidades. ¿Quieres saber más sobre ella? Entra en bbva.es o la app de BBVA e infórmate.