Seguro dental, ¿cómo funciona?

Conoce aquí alguno de los pormenores de los seguros dentales, cómo funcionan y cómo puedes contratar el tuyo
Aunque sea una cuestión de pura necesidad, los tratamientos dentales y las visitas al dentista están excluidas en muchos casos de los seguros básicos de salud. Y la Seguridad Social, por ejemplo, te cubrirá operaciones e intervenciones de gran calado, pero no cuestiones tan necesarias como revisiones, limpiezas u ortodoncias (para más información puedes consultar el programa de salud bucodental de la Seguridad Social en la web del Ministerio de Sanidad). Por ello, un seguro dental privado no solo puede ayudarte a cubrir estos gastos, sino además a acceder a una red de profesionales de primera categoría.

Las ofertas de los seguros dentales

Los problemas derivados de enfermedades en la boca y en los dientes pueden requerir intervenciones de gran magnitud. Por ello, es frecuente que en los seguros nos encontremos con dos realidades constantes: los periodos de carencia y el catálogo de prestaciones.

Los periodos de carencia de un seguro dental son aquellos plazos de tiempo en los que el beneficiario del seguro no puede acceder a la totalidad de los servicios ofertados. Este hecho hace más que aconsejable contratar un seguro dental antes de padecer un mal, ya que de hacerlo cuando ya tienes molestias bucales podría darse el caso de que algunas de las atenciones más esenciales no estuvieran cubiertas si no llevas cierto tiempo ya asegurado 

¿Y qué me cubre un seguro dental? Esta pregunta se la formula todo asegurado, sobre todo a la hora de necesitar un tratamiento. Ahora bien, siempre es bueno conocer a priori qué ofrece cada aseguradora para no llevarse sorpresas de última hora.

Las coberturas que generalmente cubre un seguro dental son las siguientes:

  • Odontología preventiva: consulta de odontología general para exploración y diagnóstico, limpieza de boca o consulta en caso de urgencia.
  • Pruebas diagnósticas: radiografías, ortopantomografía (panorámica), cefalometría, fotografías o diapositivas, tomografía axial computerizada (TAC dental), estudio radiológico para ortodoncia, etc.
  • Intervenciones quirúrgicas: extracciones, cirugía oral menor, cirugía preprotésica o de ortodoncia, etc.
  • Otras coberturas: ayudas para ortodoncias o implantes, servicios de atención en el extranjero, tratamientos de corrección bucal, etc.

Así funciona un seguro dental

El funcionamiento de los seguros dentales varía fundamentalmente en función de cada producto contratado. Por ello, siempre es bueno a la hora de considerar cómo funciona un seguro en cuestión, analizar el producto en sí que te interese.

También podría interesarte