Así puedes desarrollar nuevo contenido para tu perfil de Instagram

El formato de publicidad que se realizaba en medio tradicionales, como la televisión, la radio o los medios escritos, era más publicidad pura. Con esto nos referimos a anuncios en los que se hablaba del producto, de la empresa,... Sin embargo, con la llegada de Internet, esto cambió por completo. El enfoque empezó a ser otro, más dirigido al consumidor. Se respondía a preguntas como: ¿Qué es lo que necesita el usuario? ¿Qué puedo aportar a mis potenciales clientes?

Esto hizo que la fórmula cambiase, dejando a un lado la comunicación unidireccional para dar paso a una más bidireccional, en la que se conversa con el cliente, incluso con el futuro cliente. Es el cambio de ‘chip’ que se debe producir, es decir, no debemos centrarnos en ese modelo de publicidad en el que solo se habla de lo que se quiere proporcionar, sino que debemos de aportar ese valor que busca el usuario: ayudarle en sus necesidades, resolver sus dudas o, simplemente, entretenerle o divertirle. Todo, dentro del sector en el que trabaja nuestra empresa.

A la hora de crear cualquier contenido para redes sociales, es importante que tengamos en cuenta 3 factores:

• Llamar su atención, que conozca nuestra marca: las redes sociales están cada vez más saturadas de cuentas de empresas, que, como nosotros, tratan de atraer al consumidor. Esto hace que la cantidad de impactos que reciben a diario sea muy alta por lo que, si no realizamos un contenido que destaque, pasaremos desapercibidos. 
  
• Hacer que se sienta identificado: siempre que realicemos, por ejemplo, un texto en Internet, hemos de pensar en el perfil de cliente ideal, el cual se debe definir previamente y al detalle. Tener claro a quién nos dirigimos nos permitirá adecuar el contenido a sus necesidades y, por tanto, conseguir que sientan suya nuestra marca, que piense: “esto es para mí”.
• Ganarnos su confianza: es el punto clave para poder venderle nuestro producto o servicio. Hay que tener en cuenta que muchos usuarios no han visitado nuestro punto de venta, no nos conocen. Esto convierte a las redes sociales en el entorno ideal para generar esa relación de confianza tan necesaria, ese vínculo que se forma con estos contenidos de valor. La venta llegará a posteriori y de forma más fácil.

Hemos de combinar dos conceptos principales:

• Temas que son tendencia: aquellos de los que se habla en la actualidad, bien por ser un hecho que esté ocurriendo en el momento (como lo relativo al COVID-19, por ejemplo) o, también, por el contexto que viven nuestros clientes (si es verano, por ejemplo, podemos hablar del tipo de ropa a utilizar en esta estación o dar consejos para quien quiera adelgazar). En resumen, hay que saber de qué se está hablando para adaptar sus contenidos a ello.
• Lo que le interesa comunicar a nuestra marca y/o al usuario: hay muchos contenidos que, si bien le interesan a la audiencia, pueden no venirnos bien a nosotros, porque no nos aportan valor o no nos ayudan a vender. Esto hace que lo idóneo sea entremezclar aquellos que sí sean del gusto de la gente con los que nos reporten algún beneficio como marca, dándoles un toque más amigable, usando fórmulas como ‘pregunta-respuesta’, tutoriales, etc.

Son muchos los contenidos que podemos realizar en redes sociales:

• Tutoriales.
  
• Reseñas de producto.
• Explicación del servicio.
• Frase célebre.
• Promoción.
• Novedad.
• Charla o entrevista.

Para llevar a cabo estas publicaciones disponemos de distintos formatos:

• Vídeo grabado o en directo.
• Foto del producto, fotos de la tienda, o local donde tengas tu negocio y retratos, los cuales ayudan a humanizar la marca.
• Creatividad.
• Carrusel de imágenes o vídeos.

Son las temáticas de las que vamos a hablar en nuestras publicaciones de Instagram. Tenerlas bien definidas nos permitirá concretar los contenidos que vamos a realizar a lo largo de los siguientes 30 días. Esta planificación mensual debe realizarse siempre, poniendo especial atención a las fechas clave, desde días especiales (como San Valentín, por ejemplo) a lanzamientos de producto, dejando el resto de días para otro tipo de contenidos, dependiendo también de la periodicidad con la que publiquemos.

• Publicaciones en el Feed: el perfil o la galería de fotos que ofrece la propia red social. Estas pueden tener un formato vertical, horizontal o cuadrado.
• Instagram Stories: vídeo verticales (1.080 x 1.920 px)  que se mantienen 24 horas activos en nuestro perfil. Se pueden hacer desde el mismo móvil y permiten, entre otras cosas:
  • Humanizar la marca.
    
  • Lograr cercanía y confianza.
    
  • Aumentar la interacción con la cuenta.
• Vídeos en directo: retransmisiones a las que se pueden conectar los usuarios. Para realizarlas, hemos de ir al icono de la cámara situado en la parte superior izquierda. Tras pulsar en él, se nos abrirán las historias de Instagram. Para comenzar el vídeo, deslizaremos las opciones de la parte inferior hasta la que pone ‘Directo’ - ‘Iniciar vídeo en directo’. Una vez terminemos, Instagram nos dará dos opciones: guardar el vídeo en el carrete (descargándolo) o compartirlo en el Feed. Como opción adicional, podemos hacer directos de forma compartida.
• IGTV: vídeos que duran más de un minuto, los cuales quedan alojados en otra parte del perfil.

A estos vídeos se le pueden añadir ‘stickers’, los cuales se encuentran fácilmente. Para ello, una vez hayamos realizado el vídeo, deslizaremos hacia arriba para que nos aparezca el menú con todos los disponibles. Son realmente útiles, ya que permiten mencionar a un tercero, indicar la ubicación, informar al cliente, etc.

El acceso a esta herramienta de gestión de contenidos que ofrece Instagram (y también Facebook), se realiza a través de http://www.facebook.com/creatorstudio. Nos permite desde programar el contenido de los días siguientes hasta obtener estadísticas de lo ya publicado.

En el caso de Instagram, entraríamos en la herramienta, normalmente, a través de una cuenta personal. Aparecerán todas las publicaciones ya realizadas y, también, las programadas (incluso si estas se han hecho desde fuera de Facebook Creator Studio, ya que está vinculada con la cuenta).

Para crear un contenido desde Facebook Creator Studio, pincharemos en el botón ‘Crear Publicación’. Este nos permite elegir si es para la sección de noticias (nuestro Feed) o para IGTV (ampliando, en este caso, los 15 minutos de duración máxima que ofrece la app de Instagram para este tipo de contenidos, a 60 minutos).

• Si optamos por la sección de noticias, nos será posible incluir texto, imágenes (se recomiendan cuadradas), emojis, hashtags, etc. Una vez tengamos lista la publicación, en la parte inferior derecha se encuentra el botón ‘Publicar’.

• Si se opta por IGTV, subiremos un vídeo, con un título, una descripción y, también, una portada para él. Por defecto, se selecciona un fotograma del vídeo, pero es posible crear una nueva con herramientas como, por ejemplo, Canva. Al terminar, y también en la parte inferior derecha, estará el botón de ‘Publicar’. Si pinchamos en la flecha, nos da la opción de programar.