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Cosas a tener en cuenta al reformar una casa

Descubre los aspectos que no se tienen que olvidar al reformar una casa.
Hay un momento, en la vida de toda casa, en el que se tiene que poner en marcha una pequeña reforma que permita el arreglo de aquello que, con el tiempo, se ha deteriorado o, simplemente, ha dejado de gustar. En este artículo, y para todo aquel que esté pensando en comenzar con una obra en su vivienda, explicamos las cosas a tener en cuenta al reformar una casa (tanto antes como durante la obra). ¡No dejes de leer!

Cosas a tener en cuenta al reformar una casa

Son varias las cosas que, dependiendo de la parte del proceso en la que uno se encuentre, han de valorarse al reformar una casa.

Cosas a tener en cuenta antes de empezar a reformar una casa

A la hora de reformar una casa, ser precavido es fundamental, ya que ayuda a evitar esos problemas que, de no serlo, se pueden producir al empezar o en el transcurso de la obra. 

Es conveniente, por ejemplo, que se pidan los permisos necesarios para la ejecución de la obra (ya sea “menor” o “integral”), que son competencia municipal (lo que hace que puedan variar de un municipio a otro y se requiera una consulta previa). 

A nivel más “comunitario”, es recomendable que se revisen los estatutos de la comunidad (en el que se indican, con detalle, los derechos y obligaciones de los propietarios) para ver si se puede hacer la obra (aunque la Ley de Propiedad Horizontal ampara su realización si no altera la seguridad del edificio, su configuración o su estructura general o sus elementos exteriores y no perjudica a otro propietario) y si, siendo posible, se tiene que adecuar a unos horarios en los que se “tiene el permiso” para hacer ruido (estos, por lo común, son de 8:00 a 21:00 horas, en días laborables, y de 9:30 a 21:00 horas en fines de semana y festivos). 

También es importante, al reformar una casa, ser precavido en lo económico. Esto significa que, por ejemplo, se debe mirar si existe alguna subvención o ayuda (estatal, autonómica o local) con la que rebajar el coste de la obra. 

Cosas a tener en cuenta al empezar a reformar una casa y durante la obra en sí

Si se tiene claro que se va a reformar la casa, y que es viable, hay una serie de cosas que se han de tener en cuenta al empezar:

En relación al presupuesto

  • No solicitar un único presupuesto y sí varios (lo recomendable es, mínimo, tres), de forma que se pueda comparar y ver el que mejor se adapta a lo que se busca (relación calidad-precio) para reformar la casa. 
  • Incluir en el presupuesto todo lo que se necesita, hecho que ayudará a ajustar su importe de forma más fiable. Además, se tiene que solicitar que en el documento se desglosen, de forma detallada, tanto los gastos como lo relativo a la mano de obra, los materiales, etc.
  • Pedir un presupuesto cerrado, lo que evitará un alza del coste de la obra, durante su realización, si se produce un imprevisto. 
  • Tener en cuenta que lo común es abonar una señal cuando se firma el contrato, la mitad de lo presupuestado en el comienzo de la obra y lo restante al finalizarla.
  • Provisionar una cantidad de dinero con la que hacer frente a los posibles imprevistos que puedan surgir al reformar la casa.
  • Contratar los servicios en una única empresa, facilitando, con ello, la coordinación de la obra. 

En relación a la vivienda

  • No centrarse, únicamente, en la estética de la vivienda, o lo que es lo mismo, no priorizar el que la casa quede lo más bonita posible por encima de su funcionalidad. Lo ideal, en todo caso, es que exista un equilibrio entre ambas.  
  • Elegir unos materiales de buena calidad, aunque su coste sea algo más alto, que garanticen que no se tendrá que proceder a otra reforma en mucho tiempo. 
  • Comprar con tranquilidad (y no de forma apresurada) lo que se necesita para reformar la casa, ya que ir con demasiada premura puede hacer que se adquiera un producto que, siendo barato, no encaje con lo proyectado.

En relación a la reforma

  • Contratar personal cualificado y con experiencia, no decantándose, en ningún caso, por profesionales que no cumplan con estos requisitos (ya que lo barato, en ocasiones, puede salir caro).
  • Programar, junto a la empresa que realice la obra, unos tiempos que se puedan cumplir, es decir, ser realista y no optar por “apresurarse” en su ejecución y, tampoco, en su finalización (eso sí, es bueno que se establezca una fecha estimada en la que se vaya a terminar la reforma de la casa, para evitar que alargue en exceso).
  • Controlar el proceso de la obra es fundamental para que todo transcurra en base a lo planificado. Estar “al tanto” de todo lo que sucede en ella, además, va a permitir que se puedan realizar, de ser necesarias, las correcciones pertinentes.

¿Es necesario un arquitecto para reformar una casa?

La respuesta es: depende. Lo normal es que se requiera de un arquitecto, al reformar una casa, si se trata de una obra mayor (considerándose esta la que tiene una mayor complejidad técnica y constructiva, llegando a necesitar, por ejemplo, la modificación de la estructura de la vivienda), no siendo tan “imprescindible” si se trata de una obra menor (aunque sí recomendable).

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